El 2024 no será un año fácil. Y el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, lo tiene muy claro. La batería de medidas presentadas por el presidente de la Nación, Javier Milei, provocaron un sinfín de reacciones y la Provincia no es ajena a la realidad económica del país.

El 2023 ya es pasado. Y pese a que fue uno de los grandes ganadores de la última contienda electoral, los desafíos de ayer ya no son los mismos.

El mandatario sabe que tiene por delante el reto de revalidar su primera gestión. Pero que las armas a utilizar hoy no son las mismas. Para empezar, no cuenta con el apoyo de Nación. Y, además, hoy figura al frente, como primera oposición, de la batalla política contra el accionar del primer mandatario.

"Siempre es más fácil firmar un decretazo y mandar una súper ley que dedicarse a laburar y a generar trabajo y a generar industria", expresó en los últimos días como respuesta a la presentación de la ley ómnibus que Milei envió al Congreso.

Hoy el gobernador se siente atado de pies y manos. Y es por eso que buscó liberarse a través de un pedido de endeudamiento por el equivalente a 1800 millones de dólares y de una Fiscal Impositiva con aumentos de hasta 300 % que, según explicó el ministro de Hacienda, Pablo López, la gran mayoría quedarán por debajo de la inflación real que estiman las consultoras privadas.

La intención concreta es poder generar los ingresos necesarios para poder solventar las diferentes iniciativas provinciales y así contraponer la bajada nacional a modo de lema que generó el presidente con aquello de que "no hay plata".

Es por esto que el gobernador tomó la decisión de prorrogar el Presupuesto 2023 debido a la falta de definiciones nacionales y con el claro fin de poder tener mayor margen de maniobra para manejar los recursos provinciales.

A diferencia de la bajada de Milei, el gobernador bonaerense necesita poner en funcionamiento todo el aparato del estado provincial para poder cumplir con algunas de las promesas de campaña enroladas en el famoso "derecho al futuro" con el que, en otras palabras, consiguió llegar a los vecinos de la Provincia para generar una continuidad de lo realizado durante sus primeros cuatro años en el gobierno.

Para afrontar el 2024, los intendentes pusieron sobre la mesa la necesidad de generar un Fondo Especial para los municipios que, también, tienen en claro que será un año demasiado complejo en materia de cobrabilidad a nivel local y sin ingreso extra todo se volverá más difícil aún.

Los jefes comunales de la Costa Atlántico ya avisaron que los números para esta temporada serán hasta 25 % menores a los del año pasado. Pese a que la queja principal recae en el ámbito nacional, los jefes comunales saben que necesitarán de todas las herramientas que pueda brindar la Provincia.

Sesión maratónica

En la Legislatura bonaerense hubo sesión maratónica que terminó con pulgares para arriba y el gobernador no tardó en celebrarla. Es que las iniciativas que mandó hace menos de 15 días fueron sancionadas, "Se aprobaron las Leyes de Emergencia y Endeudamiento e Impositiva para el año 2024. Es una excelente noticia para los y las bonaerenses poder contar con estas leyes que nos permiten seguir trabajando por su futuro y avanzar con una estructura impositiva más progresiva, que cobra más a los que más tienen", explicó el gobernador tras la aprobación de las iniciativas. Y agregó: "A diferencia de Milei, logramos que las leyes se traten y aprueben de cara a la Legislatura, no de espaldas".

Gracias a la labor del presidente de la Cámara baja, Alejandro Dichiara, el gobernador logró su primer triunfo legislativo de su segundo tiempo. Y contó con el apoyo, tras acuerdos de parte, del PRO, un sector de la UCR y la Coalición Cívica.

Año nuevo

El gobernador ya dejó en claro que su principal objetivo está en la Provincia. Sin embargo, son varias las voces que empiezan a pedir desde las bases que tome una posición más activa en lo que refiere a la representación del peronismo provincial. No es un tema que hoy le interese. Las diferencias con Máximo Kirchner, presidente del PJ bonaerense, son notorios. Y el mandatario no quiere agrandar las heridas.

Los intendentes presionan desde abajo para que el gobernador vaya tomando vuelo propio. Y así lo acompañan como parte de una campaña a largo plazo en la que lo sitúan, hoy por hoy, como el principal referente para dar la pelea nacional en 2027. Una suerte de inversión política a futuro.

Milei también está al tanto. Y no por nada en las últimas horas le puso el apellido del mandatario provincial a una tasa que planea crear para pagar los 16 mil millones de dólares del juicio por YPF. "Que todos los argentinos tengamos que pagar todos los años una determinada cantidad de dólares gracias al error monstruoso que cometió Kicillof", manifestó el primer mandatario.

El fin en este caso es el principio: un trabajo fino para demonizar la figura del gobernador. Y, de esa forma, comenzar a tejer las redes necesarias para aplacar las voces más fuertes de la oposición.