Sociedad
El Transformador de Haedo, una casona con historia que enfrenta desafíos legales y busca consolidarse como un espacio de gestión comunitaria, reflexión y encuentro en el oeste del conurbano bonaerense
Por: Nicolás Rzonscinsky
22 de julio de 2023
En Haedo, al oeste del conurbano bonaerense se encuentra una mansión que condensa una enorme porción de la historia de la provincia de Buenos Aires y del país. Ubicada a tan solo dos cuadras de la estación del tren Sarmiento, la impresionante construcción data de 1926 y presenta un estilo pintoresquista muy propio de esa época.
Por si le faltaran ingredientes, la historia del lugar cuenta que fue el punto de partida del primer golpe de estado del siglo XX en Argentina, el 6 de septiembre de 1930. Desde allí salió desde el grupo que levantó las bases militares de El Palomar y movilizó a los cadetes del Colegio Militar para poner fin al gobierno de Hipólito Yrigoyen.
De hecho, el partido de Morón fue renombrado como "6 de septiembre" y mantuvo ese nombre por más de una década. Tal es así, que cada año había una celebración frente a la mansión en esa fecha. Una placa recordaba los hechos con tintes casi apocalípticos y, curiosamente, sin ninguna alusión heroica o patriótica: "Desde aquí partieron los 95 civiles hacia el Palomar y Campo de Mayo, como una caravana hacia el exilio, como un escuadrón hacia la muerte".
Manuel Fresco y Raquel Monasterio de Fresco, 1935. Foto: Archivo Histórico Nacional.
Agustín Algaze, investigador y coordinador del Instituto y Archivo Histórico de Morón cuenta a El Editor que "Fresco fue un nacionalista antiliberal, opositor a la Ley Sáenz Peña, con un pensamiento político influenciado por componentes católicos, hispanistas y tradicionalistas, cercano al ideario de esa época. En ese tiempo muchos políticos, intelectuales y artistas compartían estos valores e ideas. Admiraban a figuras políticas fuertes como Mussolini, Primo de Rivera, Roosvelt o Hitler. Que parecían dar una salida política a la debacle de las democracias liberales posterior a la crisis económica de 1929".
Lucha y restauración
Durante los años neoliberales en Argentina, en la década del 90, la casona que se encontraba prácticamente en ruinas volvió a tomar relevancia. Es que gracias a la organización vecinal la mansión de Caseros al 200 fue declarada Monumento Histórico Provincial y de esa manera evitaron que fuera demolida.
Una década después, en 2001, durante una profunda crisis social y económica en todo el país, vecinas y vecinos de Haedo iniciaron ollas populares para poder sobrevivir. El crecimiento fue tal que decidieron buscar un espacio propio para poder continuar con su labor social. En 2003, uno de los nietos del exgobernador bonaerense, les dio acceso a la propiedad para que realizaran trabajo territorial en ella. Así nació El Transformador de Haedo, una Asociación Civil con fuerte expresión de gestión comunitaria.
Sin embargo, después de más de 20 años de trabajo el espacio comunitario busca regularizar su situación, aunque los dos proyectos de ley de expropiación vencieron hace años.
Desde el transformador de Haedo mantienen una relación buena con el municipio que dirige Lucas Ghi. "Hemos articulado en ocasiones y sostenemos varias de ellas para un funcionamiento más amalgamado en la comunidad. Hace dos años empezamos a trabajar con el Archivo Histórico de Morón, pero siempre sostenemos vínculos con las personas que estuvieron en las ollas e impulsando la Personería Jurídica hasta el día de hoy", señala Macarena.
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Los restos del Sumo Pontífice fueron trasladados a la basílica de San Pedro, donde permanecerán durante tres días hasta su funeral este sábado.