Generar contenido para plataformas digitales no es para cualquiera. Federico Z, un youtuber italiano, documenta y muestra en su canal "Zazza, el italiano" las realidades de los barrios, para él, más peligrosos del mundo. Argentina no escapó de su lente. La idea que lo llevó a generar ingresos con contenido de alto impacto. Estudió el mercado de la plataforma, los gustos del público, el ritmo del algoritmo, qué cosas no eran contadas y encontró un lugar en las historias que van por las diagonales del sistema.

"En YouTube vi una oportunidad importante. Mucho dinero que se mueve y reconocimiento social", dice Federico Z a El Editor, desde Barcelona, en referencia al trabajo que realiza. Allá va, "donde hay peligro, adrenalina, desigualdad económica y criminalidad", qué busca: "Enseñarte las caras más oscuras de las ciudades que visito", asegura en la descripción de su canal que cuenta con más de 760 mil suscriptores y cientos de vídeos.

Federico prefiere no dar su nombre completo, debido a las amenazas que recibe, por algunos episodios que filmó. En especial, los que refieren a los barrios argentinos. "Me quieren matar todos los villeros donde he grabado", dice. Su vida, antes de ser youtuber, no tenía grandes sobresaltos. De familia con buen pasar económico (la mayoría profesionales), estudió Comercio Internacional en Milán, Italia - su país de origen -, hizo cursos de coctelería, le fue bien, se mudó a Australia, después a España, pero algo no terminaba de cerrar. A pesar de trabajar en uno de los mejores cien bares del mundo en Barcelona, no se sentía complacido.

En la pandemia, vio que uno de sus mejores amigos viajaba por el mundo, hacía vídeos para su canal de YouTube, tenía repercusión y le llamó la atención esa vida. Primero, quiso ayudarlo en su proyecto y se ofreció a hacer la tarea logística de los viajes y coordinar las entrevistas. Viajaron durante tres meses por toda Italia, de norte a sur, grabaron y aprendió varias herramientas sobre el manejo de la plataforma. Luego, cuestiones de la vida, se distanciaron y quedó detenido en el tiempo, sin saber qué hacer.

Zazza con la hinchada de Nueva Chicago. Foto: @zazzaelitaliano.

Como sabía que a la coctelería no iba a volver, decidió abrir su propio canal de YouTube. Empezó con contenidos callejeros de arrestos y temas sociales, pero en ocho meses no obtuvo los resultados esperados. Tan solo 500 seguidores. "Unos de los momentos más difíciles de mi vida. Me quedé sin trabajo, no sabía qué hacer de mi vida, me sentía un fracasado", cuenta a este medio. Sin ánimos de claudicar, apretó el acelerador a fondo.

"He visto que hablar de zonas marginales era mucho menos contado, en comparación con todos los influencers que muestran hoteles cinco estrellas, viajes en aviones. La gente no vive así, el 99 % de la gente sufre, está en zonas marginales y tiene pocos recursos. He documentado un poco y vi que muchos youtubers lo hacían, pero en inglés y quedaba un gran hueco en español", explica.

Empezó con una GoPro, cámara de acción, y recorrió diferentes partes del mundo como España, México, Bulgaria, Albania, Polonia, Francia, Reino Unido, Montenegro, Marruecos, Estados Unidos. Pero en Argentina es donde vio una peligrosidad diferente. Se metió en Villa José León Suarez; Rafael Castillo, localidad de La Matanza partido más poblado de la provincia de Buenos Aires; Fuerte Apache; Villa Mercado, partido Tres de Febrero, el Barrio Padre Rodolfo Ricciardelli, (ex 1-11-14); el Barrio padre Carlos Mugica (ex Villa 31, Barrio); el Papa Francisco (conocido como Villa 20). Zazza también se animó, y hasta estuvo en el medio de la barrabrava de Nueva Chicago, club del barrio de Mataderos, al sudoeste de la Ciudad de Buenos Aires.

Zazza recorrienod la Villa 31.

"La peligrosidad a la que están acostumbrados los argentinos, es diez veces mayor a la que están acostumbrados los españoles. Hay locura máxima. Usaba el taxi tres o cuatro veces para ir y venir de los barrios, y no había uno que no me dijera que no lo habían robado al menos dos veces", cuenta.

"Las historias que escuchas en las villas son tremendas. Por ejemplo, en José León Suarez, me llevaron a una vía y me mostraron un pie humano y el cuerpo todo destrozado. Obviamente en el vídeo tuve que pixelarlo. Después, de las personas que me acompañaron en el recorrido, a uno de ellos le mataron el hijo de 13 años; otro tiene un disparo en la mano porque iba en bicicleta y se vio en medio de un tiroteo". "Cuando fui a la Villa 31, me contaron que un hombre mató a su mujer, la cortó en trocitos y la puso en la sartén para comérsela. Todas historias muy heavys", resalta Zazza.

El contenido de sus vídeos en Argentina, le trajo repercusiones de todo tipo y en su mayoría amenazas. Correos electrónicos, mensajes intimidatorios o llamadas por Instagram. Pero nada de eso ha desalentado a que "Zazza, el italiano" continúe con sus aventuras. Eso sí, admite que por unos años no volverá por estas tierras. "No voy a volver a Argentina por cuatro o cinco años", dice pero explica: "Los de Chicago me quieren pegar porque he enseñado que se pegaban entre ellos y, obviamente, no les gusta que saque a la luz que tienen conflictos". En otro de sus videos el youtuber le pixeló la cara a una señora para que no salga, ella se enfadó, entonces me escriben y me dicen que no vuelva a Argentina porque me van a buscar".

"Tengo cuatro vídeos más de Argentina para publicar, pero se que me van a amenazar porque me han dicho qué era lo que podía sacar y que no. Pero yo no estoy aquí para mostrar un video que es una mentira, yo muestro la realidad", concluye Zazza.