Pizarnik: Imagen y palabra a merced de la poética

A 50 años de la muerte de Alejandra Pizarnik, la Biblioteca Nacional Mariano Moreno la recuerda con la exhibición Alejandra Pizarnik. Entre la imagen y la palabra, a cargo de la curadora Evelyn Galiazo. Inauguró el 22 de septiembre y se puede visitar hasta el 30 de abril de 2023 en la Sala Juan L. Ortiz.

13 de octubre de 2022

Alejandra Pizarnik por Lucia Plat

El interior de su pluma

Esta muestra pretende reproducir el laboratorio de escritura de la escritora, donde se despliegan materiales tales como notas preparatorias, apuntes y bosquejos de sus diarios personales. Una invitación a recorrer sus ideas y métodos de trabajo a partir de observación de las anotaciones, correcciones y borradores que se presentan en sus cuadernos. La exhibición transporta a quien la recorre al corazón de la pluma de Pizarnik y abre una ventana a sus pensamientos e intimidad.

La mayoría del material exhibido fue seleccionado de la Sala del Tesoro de la Biblioteca Nacional. Se sumó también material de colecciones públicas y privadas que fueron pedidas para completar el laboratorio. El cuaderno verde de la colección de Ivonne Bordelois es una de las joyas de la exhibición. Constituye una recopilación de diversos fragmentos de los autores de preferencia de la escritora junto con sus propias intervenciones e interpretaciones a partir de dibujos y collages. En este material se deja entrever los métodos de inspiración y composición de Pizarnik, entrelazando claramente la imagen y la palabra.


Exhibición Biblioteca Nacional Mariano Moreno


El arte de la contemplación

La Sala Juan L. Ortiz. de la Biblioteca Nacional recibe al público iniciando su recorrido con un texto pintado sobre una pared roja. Este fragmento de la autora se plasma sin edición, en crudo, con correcciones y anotaciones que dejan ver su proceso de creación y edición.

"(...)Después de haber sido mi madre y mi padre debo ser mi médico ahora. Cuando muera estoy segura que tendré que ser mi sepulturera enterradora." Alejandra Pizarnik, extracto de la colección de los diarios conservados por la Biblioteca de la Universidad de Princeton.

A continuación, se observa un gran material fotográfico de Enrique Pezzoni, Lucrecia Plat y Anatole Saderman, que muestra a la escritora a través de varios retratos en blanco y negro. Con una mirada penetrante y un primer plano de Pizarnik estas fotografías logran captar la atención por varios minutos. Luego, un conjunto de imágenes de la colección de Diran Sirinian contextualiza su infancia junto con su familia. Cada secuencia fotográfica es acompañada por bajadas textuales basadas en sus fragmentos de diarios o poemas.

Exhibición Biblioteca Nacional Mariano Moreno


Mientras se avanza por la sala, muchas mesas se despliegan exponiendo diarios, recortes, libros, cartas y manuscritos. Así es cómo a lo largo del recorrido se descubre y conoce, además de sus procesos creativos, sobre sus relaciones, sus amigos, artistas que la inspiraron y su faceta como dibujante. La pasión por las artes plásticas es un mensaje claro que se lee y se respira en toda la muestra. Ella misma describe a sus dibujos y collages como "elementales y catárticos". Estas creaciones forman parte de sus diarios intervenidos que nos muestran la clara fusión entre texto e imagen, llevando su escritura hacia un objeto material y artístico. En uno de los fragmentos exhibidos, ella misma define a la contemplación de pinturas como uno de los momentos de mayor felicidad en su vida.


Reescribir como fuerza potenciadora

"En cuanto a la inspiración, creo en ella ortodoxamente, lo que no me impide, sino todo lo contrario, concentrarme mucho tiempo en un solo poema. Y lo hago de una manera que recuerda, tal vez, al gesto de los artistas plásticos. Adhiero a la hoja de papel a un muro y la contemplo; cambio palabras, suprimo versos. A veces, al suprimir una palabra, imagino otra en su lugar, pero sin saber aún su nombre. Entonces, a la espera de la deseada, hago en su vacío un dibujo que la alude. Y este dibujo es como un llamado ritual". escribió Pizarnik en el prólogo de una antología de poetas jóvenes.

Alejandra Pizarnik por Lucia Plat

Aparecen constantemente en sus cuadernos fragmentos de otros autores, transcriptos, interpretados e intervenidos. Sus fuentes de inspiración y su método dejan ver el uso de otros textos como materia prima. La importancia y la fuerza de la contemplación para la creación poética es clave en su proceso creativo. Así, en esta exhibición su obra se abre al medio para el espectador y lo sumerge más allá de la tinta que conforma a sus textos publicados, se corre el velo para dejar expuesta la pluma maestra. Una pluma desnuda frente a sus errores, correcciones y reescritura. Y ahí, en la equivocación, la reformulación y la contemplación están las bases de sus creaciones y su concepción sobre la potencialidad de la escritura.

Con 36 años Alejandra Pizarnik dejó una obra literaria que se transformó en un legado invaluable y que tuvo una potencia que la convirtió en referente de generaciones posteriores. Nos enseña cómo la fuerza de las palabras sobrevive más allá de la ausencia física, y que es ahí donde reside el poder de la escritura y, en este caso, de la poesía.


Sociedad

El cuerpo del papa Francisco permanecerá en la basílica de San Pedro durante tres días antes del funeral

Los restos del Sumo Pontífice fueron trasladados a la basílica de San Pedro, donde permanecerán durante tres días hasta su funeral este sábado.